Precioso gong con grabado espectacular, con significado simbólico budista. El grabado minucioso esta hecho por artesanos Nepalíes. El sonido es excelente, intenso, rico y duradero en el tiempo. Es ideal para salas de meditación y actividades como el yoga.
El término “Tam Tam” hace referencia a la anatomía plana de estos gongs. Cuando el Tam-tam es golpeado con una maza acolchada y suficiente intensidad cerca de su centro se produce primero un sonido grave y profundo de altura indeterminada. Instantes después, este sonido crece en complejidad y volumen, como consecuencia de la generación de gran cantidad de armónicos, hasta alcanzar un clímax en registro agudo (similar a un rugido). A continuación, el sonido agudo va decayendo con rapidez, permaneciendo un sonido grave de altura indeterminada que puede prolongarse durante varios minutos como halo sonoro en caso de no ser apagado intencionadamente. El sonido agudo no se produce a no ser que el golpe inicial tenga suficiente intensidad. El brillo característico de un Tam Tam se relaciona con el modo en el que surgen las vibraciones de altas frecuencias. Los repetidos golpes de martillo, distribuidos alrededor de su superficie, influyen en la transferencia de energía vibracional a lo largo de todo el instrumento, haciendo que dicha transferencia vaya perdiendo simetría conforme se va desarrollando. He aquí la singularidad de los gongs construidos artesanalmente.
Gong de 40 cm con motivos budistas